Jabones han existido desde los comienzos de la historia de la humanidad y sigue siendo una de las actividades que mas rápidamente puede enriquecer a quien lo elabora y con la misma celeridad conducirlo a la ruina.
Esta actividad a sido acaparada por grandes grupos de capital multinacional que realmente dejan muy poco espacio para que florescan pequeñas empresas localistas
Sin el amparo de alguna ley que proteja a la industria nacional, en muchos países esta producción ya no existe siendo surtida la necesidad de este adminiculo por material importado, pero no todo es desventaja, como contrapartida lo que abunda son pastillas de jabón de muy pobre calidad.
El jabón americano (jabón de sebo) gano merecidamente su fama de muy malo, debido a que en muchos casos se procesa sin separar el Ácido Esteárico (Estearina) del resto de los componentes.
Esto da un jabón maloliente que no logra corregirse por mucha fragancia que se le adicione, el ahorro que se hace al saltearse una operación de procesamiento resulta una perdida en calidad y en preferencias del consumidor que solo compra lo mas barato cuando su situación económica así lo obliga.
Una antigua practica olvidada en la producción de jabones tradicionales ha sido la de adicionar a la pasta del saponificado un terpeno del tipo Colofonia, (en cierta época la resina tenia gran demanda para otros usos y los economistas de escritorio optaron por no incluirla en el proceso de saponificacion) esto hace que la cadena molecular quede abierta y el jabón sea inestable frente a los ácidos y las aguas duras, que obnivulan su poder espumigeno.
Los costos del combustible necesarios para calefacciónar grandes cantidades de grasas para su saponificacion, hicieron que el método tradicional de hervirlas en lejía alcalina se convirtiera en antiecómico, pero aun se practica en volúmenes pequeños, la metodología moderna a desarrollado un proceso de obtención del tipo emulsión donde se baten las grasas junto con el álcali como si se tratase de elaborar una salsa mayonesa.
Claro es que aun resta por resolver el rompimiento de los dobles enlaces de los ácidos grasos para evitar su comportamiento de gel, es decir, que se contraiga sobre su propia masa expulsando agua, glicerina y todo aquello que le resulte ajeno, seguido de resquebrajamiento de la pasta elaborada.
Por el procedimiento tradicional, el saponificado se calienta con Ácido Clorhídrico diluido y luego se neutraliza con Hidroxido Sódico, al enfriarse los ácidos grasos liberados de los dobles enlaces se solidifican en capas según su especie. Este efecto se aprovecha para separar la Estearina , buena para producir bujías de alumbrado y el Ácido Cetilico para jabones de buena calidad.
El endurecimiento de las grasas vegetales se efectúa sometiendolas a una columna de Hidrógeno, tal como ocurre en la elaboración de margarinas, con este procedimiento se obtiene una merma sensible en el álcali necesario para su saponificacion con consecuente ahorro de combustible.
Pero las exigencias de producción aun mas económica nos trajeron la elaboración de jabones por medio de la síntesis.
La sulfonacion de las gorduras vegetales o animales es un método muy utilizado actualmente y aunque siempre queda algo de aceite sin sulfonar, este se despeja luego por la vía del efecto de ion común que siempre se utilizo en el método tradicional, los dobles enlaces se rompen debido a la intervención del ácido benceno sulfonico que se gesta en el mismo procedimiento.
El mayor inconveniente radica en que el ion sulfonio que oscurece la piesas lavadas y no proporciona el mismo efecto residual del jabón tradicional a pesar de que se elabore con las mejores materias primas.
El blanqueo se mejoro con optar por el Amonio Cuaternario como saponificante, agregando a la pasta, aceites con antioxidantes para lograr un efecto residual mas agradable para la piel del operador del lavado.
También se elaboran pastillas de jabón sintético donde las sales detersivas forman una pasta solida debido a un polimero hidro soluble que las porta, suele elaborarse en base a Acido Benceno Sulfonico y Amonio Cuaternario.
El Palo de Jabón, el Amole y otras variedades vegetales silvestres que aun sigue siendo utilizado en ciertas regiones del mundo para el lavado, tiene su homónimo sintético en la N-propil-Betaina, tanto la forma natural como sintética facilita la generación espumigena de los jabones, pero la tarea de la espuma es solo la de capturar la suciedad que es desalojada por el alcali al refregar y sarandear las piesas a lavar.
Los fosfatos son espumigenos pero dada su escasa potencia electrónica su efecto es mas espectacular que efectivo.
Como puede apreciar el lector luego de leer este texto, la jaboneria puede resultar un muy buen negocio o uno bien ruinoso, si aun asi desea explorar sus propias posibilidades de iniciarse en este oficio, haga aquí mismo su cuestionamiento o comentario y estaremos gozosos de responderle a la brevedad.
Montevideo, marzo del 2009-raulDC
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